El jueves 27 de junio, el presidente en funciones de Estados Unidos y su predecesor debatieron, centrando gran parte de la discusión en la economía. Donald Trump destacó su gestión en términos de empleo y crecimiento, mientras que Joe Biden afirmó haber recuperado al país de los efectos de la pandemia.
Intervención del presidente Joe Biden.
Joe Biden, el presidente demócrata de Estados Unidos, y Donald Trump, su oponente republicano, intercambiaron críticas sobre su manejo económico en los primeros momentos del debate presidencial de este jueves.
En cuanto a la inflación, un factor clave para las próximas elecciones presidenciales del 5 de noviembre, Biden se atribuyó el mérito de “volver a poner las cosas en orden” después de la pandemia de coronavirus.
De hecho, tras alcanzar un máximo de cuatro décadas en el verano de 2022, con una inflación anual del 9,1%, la variación de los precios se ha estabilizado en un 3,3%, aunque sigue siendo elevada para las metas de la Reserva Federal, que busca reducirla al 2%.
Respuesta del expresidente Donald Trump.
Trump, por su parte, aseguró que había gestionado “la mayor economía en la historia” del país antes de que la pandemia ocurriera y destacó que tomó medidas para evitar que la caída económica se profundizara aún más.
Estados Unidos causó inestabilidad en los mercados mundiales cuando, justo después de la pandemia de Covid-19, estuvo al borde de una recesión, definida como dos trimestres consecutivos con crecimiento negativo del producto interno bruto. No obstante, logró evitarla.
La crisis sanitaria, que ocurrió durante el último año del mandato de Donald Trump, interrumpió un periodo de relativa estabilidad en la primera economía del mundo, con una inflación anual inferior al 2% y la menor tasa de desempleo en medio siglo. Durante la pandemia, la tasa de desempleo se disparó casi hasta el 15%, su peor nivel desde la Gran Depresión de los años 30, y las solicitudes semanales de subsidios por desempleo aumentaron de 200,000 a un récord de 6.8 millones.
Desde entonces, la situación ha podido estabilizarse, aunque la pandemia dejó huellas que alteraron el mercado laboral estadounidense, con empleados exigiendo más derechos y salarios, y empleadores enfrentando dificultades para contratar personal.
Fuente: France24.