La caída de la inflación y de las expectativas inflacionarias junto al débil crecimiento económico del país, llevarían al BCRP a iniciar un ciclo de reducción de tasas de interés.
Perú podría unirse a la lista de naciones latinoamericanas que han iniciado un período de disminución de tasas de interés, mediante la intervención del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP). Recientemente, tanto Chile como Brasil, destacadas economías de la región, han llevado a cabo sus primeras reducciones en las tasas de referencia.
La tendencia a la baja de la inflación, el descenso de las expectativas inflacionarias y la posición contractiva de la política monetaria, en un contexto de desaceleración económica, impulsarían al BCRP a empezar una reducción de la tasa de interés de referencia, como máximo, en el cuarto trimestre del 2023. Los posibles ajustes representarán una oportunidad para mitigar el alto costo de endeudamiento que experimentan las empresas peruanas. En la actualidad, varias de estas empresas se encuentran en proceso de renovar sus solicitudes de crédito, ante el inminente recorte de tasas.
Cada vez más cerca al recorte de tasas de interés.
Desde agosto de 2021, el BCRP comenzó una fase de incrementos en su tasa de interés con el propósito de frenar el aumento de la inflación. Después de 18 meses de ajustes consecutivos, en los últimos siete meses, el BCR ha mantenido esta tasa en el 7.75%.
Hoy, el panorama es diferente. “El nivel de 7.75% es inusualmente alto e implica una política monetaria contractiva, en momentos en que la actividad económica tiene un débil avance. El BCRP tendría que flexibilizar un poco esa posición”, señala Hugo Perea, economista jefe del BBVA Research.
La economía experimentó una disminución del 0.4% en el primer trimestre de 2023, con una estimación de un modesto crecimiento del 0.8% en el segundo trimestre. Además, las previsiones de expansión económica para este año siguen siendo revisadas a la baja.
Prudencia en la política monetaria.
El directorio del BCRP será prudente al determinar la disminución de la tasa de interés de referencia. Esperará a que la disminución de la inflación continúe consolidándose. Esta situación se prevé que tenga lugar en el último trimestre del año, según las proyecciones fundamentales de Scotiabank y BBVA. El presidente del BCRP, Julio Velarde dijo que no quiere apresurarse porque no tendría mucho sentido recortar la tasa para, después de tres meses, eventualmente volver a subirla.
Sin embargo, no descartan la posibilidad de que el recorte pueda incluso adelantarse a septiembre. Scotiabank considera que tal posibilidad es ahora mayor.
Las estimaciones de las entidades bancarias sugieren que durante el resto de 2023 podría haber hasta dos disminuciones en la tasa clave, cada una de 25 puntos básicos. De esta manera, es posible que la tasa de referencia termine el año en un 7.25%. Este ajuste moderado se debe a la persistencia de dos riesgos potenciales para la inflación: el efecto del Fenómeno de El Niño global a inicios de 2024 y el aumento actual en los precios del petróleo en el mercado internacional.
Reducción en tasas y la influencia en el tipo de cambio.
La aplicación de una política monetaria expansiva, con la reducción de tasas de interés, tiene un doble efecto sobre el tipo de cambio. El primer efecto inmediato es la salida de los inversionistas del país, porque las tasas de interés se vuelven menos rentables y buscan otros países donde las tasas sean altas. Compran dólares, aumentando el tipo de cambio y sus inversiones las colocan en otros activos de mayor rentabilidad. El segundo efecto tiene que ver con la expansión económica. Tasas de interés más bajas hacen que los préstamos sean más atractivos para los consumidores y las empresas, lo que incentiva el consumo y la inversión, dinamizando la economía. Una mayor actividad económica en el país incentiva a que los inversionistas vendan sus dólares para invertir en el país, disminuyendo el tipo de cambio. Si sube o baja el precio del dólar dependerá de las circunstancias en la que se encuentre la economía del país y cuál de los efectos tome mayor relevancia.
El alza de las tasas de interés por parte del BCRP, para controlar la inflación también influyó en el tipo de cambio con una tendencia a la baja. La reducción de tasas generaría presiones alcistas sobre el tipo de cambio. Actualmente, el dólar se encuentra debajo de los S/ 3.70; debido a factores externos como el alza de tasas de la FED en Estados Unidos. El BCRP tendrá que manejar con prudencia la reducción de tasas para que el impacto sobre el tipo de cambio no sea mayor.
Los préstamos corporativos.
Como ya se mencionó antes, la disminución de la tasa de interés de referencia tendrá un impacto en la accesibilidad al crédito y en los costos de financiamiento, especialmente para las compañías. A corto plazo, las tasas de interés que más responderán a esta reducción están relacionadas con los préstamos corporativos y aquellos destinados a grandes empresas.
En un segundo momento, toda la estructura de tasas de interés, tanto de préstamos como de depósitos, se alineará gradualmente a las decisiones que toma el BCRP.
El cambio de las circunstancias prevista para el último trimestre del año podría dar un estímulo a los préstamos. La disminución de la tasa de referencia brinda margen para una mayor flexibilidad en la adquisición de deudas y para promover ciertos proyectos de inversión.
La función primordial del BCRP consiste en regular la inflación, la cual se prevé que nuevamente se ubicará fuera del rango objetivo este año, según las proyecciones del mercado. Sin embargo, la determinación definitiva sobre las tasas de referencia se basa en los datos económicos que surgen mes a mes. Actualmente, estos factores parecen inclinarse hacia una política monetaria que gradualmente se armonice con la política fiscal del gobierno para reactivar la economía.
Fuente: Semana Económica.